Considerada una de las artistas aficionadas más destacadas de la historia cultural de Florencia, y vista hasta hoy como su pintora mayor,
donde sus cuadros, que en otros tiempos colgaban en muchas casas, oficinas del municipio y que en la recepción de la Casa de Cultura Municipal recibían al visitante, se está extinguiendo, y su recuerdo languidece. Hoy desde la sala que fuera su casa, queremos revitalizar su obra a quien fuera maestra de maestros porque como dijera José Martí: Tener talento es tener buen corazón.